Lo más difícil de comenzar un nuevo programa de entrenamiento es volver a él luego de un largo tiempo sin entrenar. Incluso volver a la etapa donde dejaste el entrenamiento puede provocar frustración en el mejor de los casos y lesiones en el peor escenario.
Para ello es necesario hacerse un plan de acción que te permita iniciar sin tanta dificultad tu estilo de vida fitness, que incluya unos objetivos claros y medibles con la finalidad de alcanzar lo que te has propuesto.
Por ello, descubre 8 consejos para volver a tu rutina de entrenamiento de forma segura, y así lograr tus nuevos propósitos fitness en poco tiempo.
8 sugerencias para retomar tu vida fitness
1. Obtén apoyo de otros
De acuerdo a Doug Miller, profesor de ciencias del ejercicio, a pesar de que las redes sociales se han convertido en una buena opción para apoyarse, nunca se puede subestimar la ayuda de amigos en persona. Hacer esto contribuye a más responsabilidad y proporciona un grupo de amigos con los que podrás hacer ejercicio.
Así que, lo mejor, es solicitar a un compañero que se una a ti en tu aventura de entrenamiento; también puedes unirte a un club local para correr o andar en bicicleta o inscribirte en una clase de ejercicios en un gimnasio. En ocasiones también resulta motivador entrenar con alguien un poco mejor que tú para hacer una competencia sana y divertida.
2. Ignora el calendario
Establecer una fecha de inicio para la próxima semana o mes parece una buena manera de reanudar tu plan de ejercicio, pero esta simple tarea se complica cuando te das cuenta de cuántos eventos, viajes, celebraciones o vacaciones pueden obstaculizar el logro de tus objetivos.
Para ello, solo elige un día y comienza. Lo más probable es que, cuando llegues a un obstáculo ya estés acostumbrado a tu rutina y no estés dispuesto a hacerte trampa.
3. Establécete solo un objetivo a la vez
De acuerdo al entrenador PJ Monson, fundador de MyFitMojo hay que establecerse un objetivo único para comenzar y quedarse con él durante una semana. Si intentas cambiar demasiadas cosas a la vez sobre tu rutina diaria, entonces es más probable que te sientas abrumado y abandones.
Ejemplos de objetivos simples podrían ser ir al gimnasio tres veces a la semana, evitar el vino en la cena durante varios días de la semana o caminar 20 minutos todos los días. Una vez que te quedas con esto por un par de semanas, recompénsate agregando otro objetivo.
4. Adquiere nuevos equipos de entrenamiento
Comprar un nuevo equipo de entrenamiento o ropa de deporte nueva puede motivarte a reiniciar con hábitos saludables, ya que te dará la oportunidad de darle un buen uso. El nuevo equipo podría incluso ser utensilios de Tupperware para snacks saludables.
Si tu nuevo plan incluye tomar una clase de yoga, gasta dinero en algo para motivarte, como un nuevo tapete de yoga. Si planeas caminar o correr, un pulsómetro o podómetro puede darte la fuerza que necesitas para seguir adelante.
5. Haz un entrenamiento corto
No hay necesidad de intentar y comprometerte con un entrenamiento diario de dos horas, especialmente cuando estás empezando por primera vez. Terminarás cansado y con dolor. Es mejor comenzar con 10 minutos de caminata rápida o un entrenamiento de intervalos de alta intensidad (HIIT) de 20 minutos, si tu nivel fitness previo es alto.
De forma ideal, se sugiere seguir una rutina de fuerza de 20 minutos, una sesión de cardio de 30 minutos y 10 minutos de estiramientos. Lo importante es asegurarse de conocer el entrenamiento que vas a hacer cada semana. De aquí, la necesidad de tener un plan.
6. Limpia tu cocina
Según Sharon Richter, embajadora de nutrición de bebidas probióticas KeVita, además de volver al ritmo de la rutina de ejercicios, también deberás revisar tus hábitos alimenticios.
Comienza con revisar tus bebidas: limpia la nevera y la despensa de todas las bebidas artificiales y con mucho azúcar y reemplázalas por agua, leche baja en grasa o leche de almendras sin endulzar y agua de coco. Luego cambia todos los artículos que contengan jarabe de maíz con alto contenido de fructosa y colorantes, y opta por las hierbas frescas, mostazas naturales, aceites y vinagre.
7. Cambia una comida poco saludable por una más sana
De la misma manera que deseas evitar exagerar con tu rutina de ejercicios, trata de retomar hábitos alimenticios más saludables cambiando una comida a la semana. Por ejemplo, para el desayuno, elige proteínas magras y carbohidratos ricos en fibra como las claras de huevo con verduras.
Cuando estés listo para almorzar, puedes optar por una ensalada que incluya proteínas saludables como nueces, pollo o pescado. Para la cena, concéntrate en el control de la porción. y permítete un par de bocados de chocolate negro para el postre. Notarás con el tiempo que comenzarás a anhelar opciones más saludables.
8. Mantén un diario de alimentos
Escribir lo que comes todos los días te dará conciencia de lo que realmente estás haciendo con tu cuerpo, especialmente, para ver cosas como el alcohol. Por ejemplo, si tomas dos copas de vino durante la semana con la cena y cuatro cócteles un viernes y sábado, eso suma 18 bebidas por semana. Intenta reducirlo a 12, luego a 8, y así sucesivamente.
Si al cabo de un tiempo descubres que los refrigerios incluyen dulces y otras golosinas poco saludables, sustitúyelas por almendras crudas, frutas, yogur bajo en grasa u otras opciones saludables.
Fuente: https://www.entrenamiento.com